Envolverte
Deja que te envuelva
entre mis mañanas,
entre mis trozos de papel
colmados de retazos y tachones.
Déjame envolverte
esos ojos bisbiseantes,
el alivio de tu boca,
el bálsamo de tu alegría.
Que te custodien las jacarandas.
Que te hago una cerca con mis brazos
y los besos no se escapan.
Déjame envolverte
las turbulencias,
el enfado
y los pies fríos.
Deja que me deshaga de los atavíos,
de la pereza,
de esta frontera
entre tu futuro
y el mío.